Caso 11

Juan Antonio Morales Lozano, es profesor de la Universidad de Sevilla de la Facultad de Ciencias de la Educación.
El área donde esta inmerso su trabajo es Didáctica y Organización Escolar.
Su labor de investigación es importante, proyectos que ha llevado a cabo pueden ser; Evaluación de un programa innovador de desarrollo profesional docente en la universitario (D.P.D.U) Titulado guía de programación universitaria basada en la práctica de clase y Uso del e-Learning en las Universidades Andaluzas: Estado de la Situación y Análisis de Buenas Prácticas.
El proyecto de evaluación innovador de desarrollo profesional docente en la universidad está titulado guía de programación universitaria basada en la práctica de clase.
Responsable de la investigación : Luis Miguel Villar Ángulo y el organismo financiado es el ministerio de Ciencia y Tecnología.

La necesidad de innovaciones en la evaluación es particularmente necesaria, porque todo parece indicar que la evaluación es uno de los puntos donde más "chirría" el proceso de enseñanza/aprendizaje de las ciencias, o donde más claramente se manifiestan sus insuficiencias. En particular, es quizás el aspecto que establece una línea de confrontación más clara entre profesores y alumnos, contribuyendo a distorsionar el clima del aula. Es también uno de los dominios en el que las ideas y comportamientos docentes "de sentido común"M ( inevitabilidad del fracaso de un porcentaje elevado de alumnos, dado que "no todo el mundo está capacitado para las ciencias", facilidad de evaluar las materias científicas con objetividad y precisión, etc,).

• Una primera característica que ha de poseer la evaluación para jugar un papel orientador e impulsador del trabajo de los alumnos es que pueda ser percibida por estos como ayuda real, generadora de expectativas positivas.
  
• Una segunda característica que ha de poseer la evaluación para que pueda jugar su función de instrumento de aprendizaje es su extensión a todos los aspectos -conceptuales, procedimentales y actitudinales- del aprendizaje de las ciencias, rompiendo con su habitual reducción a aquello que permite una medida más fácil y rápida.
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  Si aceptamos que la cuestión esencial no es averiguar quienes son capaces de hacer las cosas bien y quienes no, sino lograr que la gran mayoría consiga hacerlas bien, es decir, si aceptamos que el papel fundamental de la evaluación es incidir positivamente en el proceso de aprendizaje, es preciso concluir que ha de tratarse de una evaluación a lo largo de todo el proceso y no de valoraciones terminales.